Hígado encebollado
Una receta casera y sencilla del hígado encebollado, se prepara con bistec de hígado de res, cebolla blanca, comino, sal, pimienta.
El hígado encebollado es un plato con más de 600 años de antigüedad, y su origen, es claramente europeo. Posiblemente español, aunque en la actualidad también es común en la gastronomía de Francia, Italia, Portugal y Alemania. Posteriormente, y tras la colonización de América, la receta fue adoptada en casi todos los países latinos, con algunas variantes.
El hígado encebollado cuenta la historia de la división de las clases sociales. Los cortes magros de res estaban reservados para la nobleza, y todas las vísceras, consideradas en aquel entonces como desperdicios, eran para los pobres y los campesinos. En este apartado estaban las mollejas, la panza, los sesos, los riñones y el nutritivo hígado.
Al pasar de los años, las vísceras dejaron de ser “un desperdicio”. Y comenzó su venta en carnicerías y mercados. Aunque se mantuvo constante el hecho de ser mucho más accesible, que otros cortes de carne. Y lejos de los tabúes sociales, las vísceras aportan un giro de tuerca impresionante a la gastronomía de muchos países. Permiten a los cocineros hacerse de sabores nuevos y diferentes, a muy bajo costo. De hecho, las vísceras son protagonistas de diversos platos típicos. Como los famosos cayos, el mondongo, la chanfaina, puchero gallego, la guatita ecuatoriana, entre tantos otros.
Este delicioso platillo tuvo su auge más reciente en las décadas de los 70 y 80, pero ha decaído en los paladares de las sociedades más jóvenes. De hecho, en ocasiones es difícil conseguirlo en la carta de restaurantes y mercados. Lo cual no es muy justo porque este plato tiene la combinación perfecta de sabor, economía y aporte proteico.
Mi abuela, quien tuvo la cultura de la España postguerra, procuraba preparar este platillo con frecuencia, ella decía “que el hígado alimentaba”. No golpeaba el bolsillo, y era perfecto para ayudar a subir la hemoglobina. Luego de la guerra, las condiciones eran más favorables, sobre todo en países como Argentina o Uruguay que tienen una enorme industria ganadera, pero la costumbre de preparar hígado encebollado ya había sido arraigada culturalmente, y se sigue preparando en muchos lugares. Entonces, antes de pasar a esta sencilla receta, queremos contarte como se come este platillo hoy en día en los diferentes países.
¿Cómo es el hígado encebollado en cada país?
- Colombia: En Colombia, el hígado encebollado es modesto. Además del hígado, cebollas y sal, se le agrega cilantro y perejil. El acompañante ideal, es un arroz blanco.
- Ecuador: Se conoce como bistec de hígado y lleva cebolla, pimientos (rojos/verdes), tomate, y aliñado con ajo, comino, achiote, cilantro/perejil. Se sirve con arroz y patacones.
- Francia: El hígado se fríe en mantequilla y se combina con tocino. En este caso, al igual que en España, el puré de papas es la guarnición más frecuente.
- Italia: Los italianos utilizan muchas especias para este plato: pimienta, laurel, romero y hasta nuez moscada figuran en la lista. Además, marinan el hígado con vino tinto.
- México: El famoso hígado a la mexicana, se guisa en una salsa de fuertes condimentos con tomate y cebolla. Este platillo se acompaña de frijoles y arroz.
- Venezuela: Tiene una de las versiones más sencillas. Lo normal es usar muchas cebollas, una pizca de comino, una pizca de pimienta y no mucho más.
Si te has animado a hacer esta receta, recuerda que el hígado es una carne “friable”, es decir, que se desmenuza fácilmente. El tiempo de cocción requerido para el hígado es muy bajo, y debes tener cuidado de no romperlo cuando cuando lo voltees, o mientras lo estés aderezando. Del resto, es super sencilla y rápida de hacer.
Hígado encebollado
Ingredientes
- Ingredientes:
- 600 g. de bistecs de hígado también puedes comprar un trozo de hígado entero y picarlo a tu gusto
- 2 cebollas blancas grandes
- ½ cucharadita de pimienta
- ½ cucharadita de comino
- ¼ de taza de aceite
- Sal al gusto
Preparación
- Coloca las piezas de hígado (bien lavadas) en un bol. Luego sazónalas con comino, pimienta y sal. Frótalas bien para asegurarte que todas las piezas queden bien impregnadas de los condimentos. Tapa el envase y guárdalo en la nevera mientras cocinas las cebollas.
- Pela las cebollas y córtalas en julianas.
- Coloca todo el aceite en un sartén. Enciende la estufa a fuego medio alto, y cuando el aceite este caliente, incorpora las cebollas. Déjalas que se doren por unos tres minutos, entonces revuelve con una paleta de cocina. Continua la cocción por unos diez minutos más hasta que todas las cebollas estén bien doradas. Si quieres que tus cebollas se caramelicen ligeramente, sólo tapa el sartén y déjalas cocinando a fuego muy bajo por veinte a treinta minutos.
- Retira todas las cebollas del sartén, y colócalas en un plato. Ajusta la temperatura de la cocina al máximo. Cuando este bien caliente, agrega los bistecs de hígado y cocínalos unos dos minutos por cada lado.
- Regresa las cebollas al sartén e intégralas con los trozos de hígado, baja el fuego al mínimo. Continúa cocinando tapado por un máximo de cinco minutos.
- Luego apaga la estufa y sirve el hígado sobre una cama de arroz blanco.
Preparación paso a paso del hígado encebollado:
Recetas adicionales que te van a encantar:
A mi me gusta mucho el bistec de higado,para ablandarlo,lo dejo marinar con leche por 20 minutos,lo enjuago lo adobo,cuando esta listo, lo sirvo con arroz blanco y aguacate una delicia !!
Un clásico de la cocina veneciana! Magnífica forma de ocultar el horrible gusto del higado!!!!