Coloque el arroz en un colador grande, y lávelo con agua corriente por un par de minutos.
Luego, viértalo en una olla grande, con las seis tazas de agua. Lleve la olla a la estufa, y cocine a fuego lento, medio tapado por aproximadamente una hora.
Cuando la mayor parte del agua se haya evaporado, y el arroz sea una masa de consistencia pastosa. Apague la estufa y déjelo reposando quince minutos para proceder a triturarlo.
Retire la astilla de canela. Ponga el arroz, preferiblemente en dos tandas, en al vaso de la licuadora, y licúelo por algunos minutos hasta obtener una pasta totalmente suave y homogénea. No debe tener ningún grumo.
Luego agregue la leche líquida, la leche condensada y la esencia de vainilla. Pruébelo, si lo considera necesario, agregue el azúcar adicional. Licue un par de minutos más y listo.
Para servir, llene los vasos con hielo picado hasta la mitad, y rellene el resto del vaso con la chicha. Decore con leche condensada y canela en polvo.